Regístrate | Conectar
El Tamiz Libros Recursos Series Únete 11 Users Online
Skip to content

Biografía de lo Humano: Introducción




No es la más fuerte de las especies la que sobrevive, ni la más inteligente, sino la que responde mejor al cambio” (Charles Darwin).

En algún momento durante la redacción de la larga serie La Biografía de la Vida me encontré con un Macluskey imaginativo, ¡cómo no!, que se descolgó con la sugerencia, estoy seguro que fruto de su curiosidad, de que sería interesante conocer y profundizar en el desarrollo de las capacidades del hombre, aquellas que nos diferencian definitivamente del resto de compañeros en el viaje de la Vida.

En un principio me pareció un deseo muy ambicioso, muy loable, muy ilusionante y muy… trabajoso. El tema me interesaba en grado sumo, pero me obligaba, como en todo campo que no has estudiado en profundidad, a asentar el marasmo de ideas inconexas acumuladas a lo largo de la vida y a ampliar mis conocimientos en la medida de lo posible. Me pareció por tanto que la propuesta era una quimera preciosa… pero nada más que una quimera.

Por la misma época estaba comenzando a consolidar mi interés sobre el funcionamiento del cerebro, órgano que consideraba y considero un misterio casi sublime en donde posiblemente tenía que encontrar mis más profundas raíces como persona. Pronto cayó en mis manos un libro arduo para un principiante, pero en el que se me explicaba las bases neuronales de la consciencia humana: “Y el cerebro creó al hombre” del afamado neurólogo Antonio Damasio. Y se me encendió la bombilla.

Bien podía unir lo que había aprendido de mis antropólogos favoritos, los tres tenores del yacimiento de Atapuerca -Arsuaga, Carbonell y Bermúdez de Castro-, con lo que me cautivaba la Arqueología Cognitiva, cuyo gusanillo me entró a través de las lecturas del prehistoriador Rivera Arrizabalaga, a lo que añadir el componente de neurología de la consciencia que había iniciado con Damasio, y así formar una base en la que apoyar la ampliación de mi conocimiento sobre el mundo de lo Humano.

Y así comenzó. Una vez en la rueda, como me sucedió al preparar la serie La Biografía de la Vida, todo parecía girar en un cúmulo de casualidades. Tras una cereza salía otra, de la forma más inesperada. Poco a poco, y disfrutando como un loco, veía que aparecía un cuerpo de conocimiento con sentido, que se iba desarrollando casi con vida propia e independiente, cubriendo un hueco por aquí, ampliando un dato por allá.

Y, como sucedió con la serie primera, las fichas se fueron acoplando y creando lo que yo defino como otro de mis vademécums, que realmente hace la función de apuntador de mi frágil memoria, en este caso de las circunstancias de la aventura hacia lo humano.

Hasta aquí os he contado cómo se fue pergeñando esta serie, cosa que espero no os haya aburrido demasiado, pero para mí arropa el sentido de todo lo que viene después. Y… ¿qué viene después?

Primates curiosos observando el primer lanzamiento de un cohete desde Cabo Cañaveral (Imagen: NASA Dominio Público)

Una nueva serie en la que intentaremos bucear en lo que nos hace unos animales especiales: tenemos una máquinaria cerebral que ha desarrollado una habilidad diferencial, la capacidad de razonar de forma recursiva, reflexiva, planificadora y proyectiva, algo más, creo yo, que la mera inteligencia.

Veremos que eso fue básicamente fruto de tres piezas principales en el puzzle: La progresiva encefalización, la capacidad de generar abstracciones mentales y expandirlas al exterior con algún tipo de lenguaje y la realimentación fortalecedora que inducía un cada vez más intenso entorno social.

Paso a paso iremos analizando estas tres vertientes de la Humanización, para desembocar en el correlato de esta historia: desde la aparición de la que creemos la primera especie humana con un atisbo de inteligencia, el Homo habilis, hasta nosotros, Homo sapiens autoproclamados “number 1” de la saga. Seguiremos sus manifestaciones culturales viendo cómo debían ser sus sociedades; cómo pudieron ser sus modos de vida y sus tecnologías. Veremos cómo en los restos arqueológicos va apareciendo la exteriorización de sus progresivas abstracciones mentales en forma de simbologías, que culminarán con la explosión del arte en su vida cotidiana; cómo va evolucionando un lenguaje que pasó de ser gestual a oral; e incluso cómo fueron trascendiéndose a sí mismos al asomarse al mundo de lo metafísico, religioso y mágico.

A la vista de estos mimbres intentaremos colegir el proceso de Humanización, cómo fue emergiendo este nuevo y potente estado mental que llamamos Consciencia.

Investigar en la historia de estas capacidades humanas excedía el propósito de la serie madre, La Biografía de la Vida. O quizás en ella no cabía el necesario detalle que mi curiosidad exigía… y espero que también la curiosidad de los lectores.

Aquí está, pues, esta nueva serie. Consideradla como el compendio de mis libretas de campo, que pongo a vuestra disposición con la esperanza de que os interese, que participéis con vuestras opiniones y así enriquezcamos el conocimiento mutuo, ¡exactamente cómo lo hizo Homo!

Seguiremos la consigna de nuestro maestro Pedro (El Tamiz) que nos ha inculcado con carácter genómico la bondad del siguiente lema de nuestras series (copio sus palabras de la introducción de “Relatividad sin fórmulas”): “esto no es un análisis exhaustivo de la relatividad y vamos a realizar simplificaciones que pondrán a cualquier físico decente los pelos de punta. Simplificaciones tremendas… y lo más horrible, sí, es que nos gusta así”. Yo aquí voy a herir las sensibilidades de biólogos, sociólogos, psicólogos, etólogos, etnólogos con “n“, antropólogos, neurólogos, lingüistas, arqueólogos, filósofos, teólogos… y un largo etcétera de *ólogos. ¡Qué Santiago me asista!

Así que, parodiando a algunos noticieros televisivos… ¡¡Comenzamos!!


Sobre el autor:

jreguart ( )

 

{ 20 } Comentarios

  1. Gravatar Cavaliery | 16/11/2015 at 04:35 | Permalink

    Gran serie se avecina!

    Una pregunta (aunque me adelanto un poco)… para ti, si tuviéramos una máquina del tiempo… Cuanto tiempo hacia atrás podríamos viajar y “pasar desapercibidos”?

    Es decir, que los rasgos faciales sean (casi) idénticos a los humanos actuales?

    No creo que en los tiempos de Lucy seamos iguales ;)

    Saludos

  2. Gravatar kambrico | 16/11/2015 at 05:33 | Permalink

    jreguart : aquí estamos al pie del cañón esperando , esto pinta para bueno , porque en esta materia nadie en el mundo puede ufanarse de saber mucho y que tu lo abordes habla muy bien de ti . y los beneficiados que somos nosotros te damos la bienvenida .

  3. Gravatar Maikl | 17/11/2015 at 12:44 | Permalink

    Adelante con ello. ¡Estamos preparados para otra saga jereguartiana!

  4. Gravatar Phan | 17/11/2015 at 12:51 | Permalink

    Aparte de : recursiva , reflexiva, planificadora y proyectiva. ….Le agregaría : separativa, comparativa y repetitiva . Suerte

  5. Gravatar Karlos F | 17/11/2015 at 03:18 | Permalink

    Jreguart, ya no puedes engañarnos. Primero te disulpas por lo simplones que va a ser tus articulos y luego nos tiras unos articulos tremendos. ;)

  6. Gravatar Macluskey | 17/11/2015 at 08:17 | Permalink

    Karlos F:

    De eso nada!! Los artículos son todos maravillosos, los que he podido leer hasta el momento (ventajas de ser editor del blog, je,je). Y además los irá enriqueciendo con vuestras aportaciones o las noticias que se vayan publicando (como la de hoy acerca de los denisovanos). Ya os aseguro yo que no va a decepcionaros nada, pero nada, nada, la serie.

  7. Gravatar jreguart | 18/11/2015 at 01:32 | Permalink

    Hola Cavaliery,

    Espero que disfrutemos de la serie, vosotros a leerla y yo con vuestras aportaciones en los comentarios.

    Con respecto a homos con las facciones parecidas a nosotros te envío este enlace de un interesante blog que escribe Bermúdez de Castro http://reflexiones-de-un-primate.blogs.quo.es/2015/10/27/el-ultimo-ancestro-comun-de-los-neandertales-y-de-los-humanos-modernos/ En el afirma que ya Homo antecessor tendría una morfología facial muy parecida a la nuestra ¡hace 850.000 años!

  8. Gravatar jreguart | 18/11/2015 at 01:34 | Permalink

    Hola Kambrico,

    creo que en algún comentario anterior quedamos en que seguiríamos en contacto… así que va a ser verdad. Espero que nos acompañes hasta el final. La serie no es tan larga como la anterior de la Vida. Pues eso… seguimos en contacto.

  9. Gravatar jreguart | 18/11/2015 at 01:38 | Permalink

    Hola Maikl,

    bienvenido a la nueva serie, que espero la disfrutes. Eso de lo saga jereguartiana es complicado de pronunciar, je, je…

  10. Gravatar jreguart | 18/11/2015 at 01:41 | Permalink

    Hola Phan,

    ¡cómo son las neuronas! La pera limonera… y aún no sabemos casi nada de ellas. Y muchas gracias por tus deseos de suerte.

  11. Gravatar jreguart | 18/11/2015 at 01:45 | Permalink

    Hola Karlos F,

    hombre… reivindico lo de simplones. A veces se me cae la cara de vergüenza al ver lo elemental de lo que escribo cuando estoy buceando por el mundo de los que realmente sí saben. Pero bueno… me conformo con formarme un patrón de pensamiento y dejar una semilla para la curiosidad… ¡A eso se le llama humildad! je, je…

    Como le he dicho a Kambrico… ¡seguimos en contacto! o mejor ¡continuamos en contacto!

  12. Gravatar jreguart | 18/11/2015 at 01:51 | Permalink

    Hola Mcluskey,

    comienza la brega. Que dios reparta suerte.

    Loas denisovanos ya son viejos conocidos nuestros. Lo bueno de la última noticia es que lo que suponíamos por un hueso de un dedo, y no había más, se ha visto corroborado por dientes de otros dos individuos. Lo cual es estupendo pues un grano no hace granero, pero tres… Además los genomas son ligeramente distintos, lo que indica que entre estos tres señores (hay un niño) hay un lapso temporal importante. Se cree que de unos 60.000 años ¡la foto se va perfilando! Esperemos que los hallazgos vayan al alza.

  13. Gravatar Chete | 19/11/2015 at 02:32 | Permalink

    Querido jreguart:

    Cai en la serie de biografia de la vida por casualidad hace una semana y la he devorado con fruiccion (con perjuicio para mis ojos, tendras que publicar un libro electronico de la serie). Como filosofo de carrera (lo que mas me intereso fue la antropogenesis), me estoy frotando las manos con la nueva entrega. Todo un reto solo el saberlo enfocar.

    Pues vamos a por el zoom politicon como lo describia aristoteles.

    Muchas felicidades por la anterior entrega y animo con la apasionante serie que nos espera.

  14. Gravatar jreguart | 19/11/2015 at 09:41 | Permalink

    Hola Chete,

    me alegra que hayas disfrutado con la lectura de la serie sobre la Vida. A pesar de tus dolores oculares… te puedo recomendar un oftalmólogo amigo mío, etc, etc…

    Con respecto al libro estoy mirando posibilidades. La verdad es que lo mejor sería un libro electrónico, pero… por un lado hay que pagar para comprarlo y yo no quiero que suponga un coste para nadie. Segundo, hay muchas imágenes y fotos a las que no quiero renunciar, ya que dan más sentido al escrito… pero en muchas de ellas habría que solicitar permisos y no estoy por esta labor. Así que posiblemente monte un pdf con todo, arreglado para que tenga sentido de libro seguido, al que todo el mundo pueda tener acceso, se pueda leer en tablets, pc o ebooks… o bien, el que tenga valor, se lo encuaderne por su cuenta. Yo voy a hacer una prueba para mí. Bueno, eso es lo que ronda por mi cabeza.

    Y espero estar a la altura de las expectativas con la nueva serie. Un saludo.

  15. Gravatar Sergio B | 19/11/2015 at 02:35 | Permalink

    Saludos jreguart,

    Seguro que va a ser otro viaje interesante, pero la verdad es que no me ha quedado muy claro que viaje va a ser. Supongo que me ira quedando claro al avanzar la serie, pero la introduccion no me lo ha aclarado del todo. No es que me hayan quedado claro esos tres factores, por que me parece a mi que la encefalizacion es un producto de la capacidad de crear abstracciones y el lenguaje y el comportamiento social no es lo que nos diferencia como especie. Vamos, que yo veo cuatro y no tres, dos comunes con otros animales y uno producto del otro, en mi optusamente un factor diferencial en total. Supongo que me he hecho un lio.

    Por cierto, no veo claro el uso que haces del termino inteligencia, si es la habilidad de resolver problemas, yo diria que muchos animales son inteligentes y el homo habilis tenia mas que un atisbo, si es como razocinio, no coincide en su uso las dos veces que la usas en mi opinion y eso lia un poco.

    Creo que un mosca se me ha quedado detras de la oreja gritandome: cuidado! antropocentrismo a la vista!, pero seguro que tu tenias la misma por ahi rondandote.

  16. Gravatar jreguart | 20/11/2015 at 12:06 | Permalink

    Hola Sergio B,

    no sé si te lo voy a oscurecer más. El propósito de la serie es bucear someramente -no me siento capacitado para más- en las circunstancias evolutivas e históricas que nos han llevado a ser “cualitativamente” distintos al resto de seres vivos. No veas en ello un antropocentrismo -comienzo la entrada con una cita de Darwin precisamente para dejar claro mi posición al respecto-. Y precisamente por esto tengo curiosidad en saber como la evolución me ha hecho a mí y a tí con capacidades que nos permiten intercambiar estas ideas.

    Con respecto a lo de los tres factores que propongo, es una invención mía y me convence. Lo cual no quiere decir que haya otras opiniones más complejas o más simples tan válidas como la mía. Nos movemos por un tema con muchas incógnitas insalvables. Por eso valoro mucho el intercambio de opiniones. Dicho esto, paso a comentar alguna de tus frases.

    La encefalización NO es un producto de la capacidad de crear abstracciones; como podrás leer en entradas posteriores la evolución de la encefalización va muchos años por delante de la manifestación física de estas abstracciones, que poco a poco las vemos reflejadas en las manifestaciones culturales del homo que encontramos en los yacimientos antropológicos. Tanto abstracciones como lenguaje son propiedades emergentes en la encefalización y coevolucionaron con ella, como si el encéfalo comenzara a utilizar parte de su potencial existente para otros menesteres no practicados hasta entonces, pero que le conferirían una clara ventaja evolutiva.

    No es mi intención el que quede la sola idea de que el comportamiento social es lo que nos diferencia como especie. Esta claro que el comportamiento social es patrimonio de hasta las hormigas. Y por supuesto nuestro comportamiento social es bastante parecido al de nuestros primos chimpancés, por ejemplo. Fíjate que lo que he escrito es esto: “…la realimentación fortalecedora que inducía un cada vez más intenso entorno social”. Y esto es diferencial en nuestra especie, nuestras relaciones sociales son más intensa y más “aditivas” en cuanto información. Y eso creo yo que fue decisivo en el progresivo fortalecimiento de nuestra capacidad de raciocinio.

    No acabo de entender cuando dices “…que yo veo cuatro y no tres…”, cuál pueda ser el cuarto factor que propones.

    En cuanto al sentido de la palabra “inteligencia” tienes razón que puede inducir a la confusión. Quizás me he permitido una licencia al “degradar” la idea “inteligencia” en comparación a la idea “capacidad moderna de raciocinio”. Hablamos de animales con inteligencia pero no hablamos de animales razonando. Este es el sentido que le estoy dando. Espero que no desvirtúe lo que pretendo decir en la entrada, pero nada es inmutable. No le veas más alcance. Homo habilis manifiesta una inteligencia, Homo sapiens manifiesta una inteligencia “más compleja”.

    Espero que sigas la serie, pues hay alguna entrada posterior en la que voy a apreciar las sugerencias de todos. Hasta entonces.

  17. Gravatar Karlos F | 20/11/2015 at 04:09 | Permalink

    Creo que Sergio B ve “cuatro y no tres”, porque separa el lenguaje de la capacidad de crear abtracciones. Y, si bien es verdad que los animales tiene lenguaje, es del tipo “Tengo hambre”, “estoy enojado”, “quiero aparearme”, etc.

    En cambio nuestro lenguaje esta fuertemente ligado a las abstracciones. Si te digo “Mi hermana fue a la tienda”, puedes entender el significado de lo que digo, a pesar de que no conoces a mi hermana, no sabes de que tienda hablo o donde esta ubicada. Las palabras de nuestro lenguaje son mas bien como etiquetas que le ponemos a un paquete que contiene conceptos mas complejos.

  18. Gravatar jreguart | 20/11/2015 at 05:30 | Permalink

    Hola Karlos F,

    muchas gracias por tu precisión. Es más… sé incluso lo que pretendes decir al soltar por tu boca el fonema “fue”.

  19. Gravatar Sergio B | 20/11/2015 at 05:34 | Permalink

    Saludos jreguart,

    Como dice Karlos F, me referia al lenguaje. El lenguaje es lenguaje, uno expresa lo que piensa, yo por ejemplo, me expreso en castellano, no en chino y no es una diferencia baladi, los distintos lenguajes humanos tienen distintas capacidades, sino compara el lenguaje matematico (con esto me refiero a las matematicas en si, no a los tecnicismos matematicos) con un lenguaje hablado cualquiera. Y no ha que olvidar el lenguaje corporal, que usamos masivamente y sin demasiada consciencia, creo que en eso estamos mas retrasados que bastantes animales, o simplemente lo hemos atrofiado. Vamos, que en mi opinioon el lenguaje no nos diferencia de los animales.

    Me referia a que la evolucion de nuestro encefalo esta regida por nuestra capacidad abstractiva, que opino que esta regida por el hecho de que cuando nos quedaron las manos libres decidimos usarlas. Uno tiene que usar abstraccion para golpear dos piedras y pensar que va a obtener con eso mas alla de romper las piedras. Yo diria que el resto es un subproducto no deseado, que dios sabe si nos va a venir bien al final o no. Pero siempre dispuesto a desasnarme, supongo que nos daras mas jugosa informacion al respecto.

    No veo claro mucha diferencia en el refuerzo social, yo creo que hay otros animales sociales que transmiten informacion, igual no tan masivamente como nosotros que hemos creado la ciencia, pero tambien hemos creado la religion y un monton de cosas mas carente del minimo razocinio, asi que no se yo si se compensan. Ademas es una cuestion cuantitativa, no cualitativa. Y al respecto de eso, el otro dia reflexionando sobre lo genial que es la ciencia me dio por pensar en que quiza la ciencia nos ha puesto a las puertas de degradar significativamente el mundo (digo quiza por ser optimista) y no se yo si eso es una ventaja evolutiva.

    Y a colacion de darwin, yo diria que es mas correcto decir que lo que se adapta son los ecosistemas un animal que se adapte demasiado bien probablemente mande el ecosistema al carajo y muy probablemente a si mismo tambien. Lo de las especies tiene sentido y tal, pero es completamente secundario. El depredador, el carronero, el polinizador, etc los nichos ecologiccos se cubren por distintos animales en distintos ecosistemas y es irremediable que asi sea, o el ecosistema no perdura. Y ya puede ser por un animal que evolucione o por un tiburon que caiga por ahi y sirva sin cambiar. Pero bueno, solo es un punto de vista.

  20. Gravatar jreguart | 21/11/2015 at 11:00 | Permalink

    Hola Sergio B,

    esta claro que hay distintos matices en nuestra forma de valorar el lenguaje y las relaciones sociales. Tendremos ocasión de seguir intercambiando opiniones a lo largo de la serie. Veo que hoy los editores han lanzado la primera entrada de la serie, así que si te parece bien seguiremos en contacto.

    Quisiera hacer un apunte acerca de que los humanos hayamos perdido el lenguaje gestual. Sólo pongo encima de la mesa el hecho de que la prosodia fonética y gestual al hablar es vital para entender lo que queremos comunicar, proceso en que las emociones juegan un papel importante. De hecho se cree que una zona del hemisferio derecho del cerebro, equivalente al área de Wernike -que gestiona la comprensión del lenguaje, la escritura e incluso la faceta oral del pensamiento- situada en el hemisferio izquierdo, es la que se ocupa de la prosodia en la comunicación. La prosodia no sólo se manifiesta en las modulaciones del sonido hablado sino también en las modulaciones de la expresión corporal que le acompañan. Esta área del hemisferio derecho también está relacionada con la prosodia musical -armonía, melodía, tonalidades…-. A mi eso me da suficientes argumentos para pensar que no hemos perdido nuestro hábito heredado de comunicarnos también con gestos. A efectos de matices de comprensión, qué distinto es hablar por teléfono que hablar mirando a la cara del interlocutor. O escuchar a la azafata panel de los aeropuertos. O qué distinta es una cara con una sonrisa emocionalmente espontánea de una cara sonriendo en el estudio del fotógrafo.

Escribe un comentario

Tu dirección de correo no es mostrada. Los campos requeridos están marcados *

Al escribir un comentario aquí nos otorgas el permiso irrevocable de reproducir tus palabras y tu nombre/sitio web como atribución.