Ya, ya sé lo que me vais a decir: hace unos meses de la última entrega de ¿Has leído…?, donde recomendaba una novela de Macluskey, y ahora voy y recomiendo otra vez un libro suyo. Pero tengo dos excusas.
La primera excusa: la culpa la tiene él. En poco tiempo ha publicado dos libros, tras mucho tiempo en el que muchos lo azuzábamos pero no lo hacía. Esta fiebre es asunto de Mac, no mío.
La segunda: el libro es excepcional. Sí, aquí tienes la versión corta de esta reseña – da igual si eres informático o no, compra el libro y léelo. Lo disfrutarás seguro. Es así de bueno, y llevo esperando años a que Mac se decidiese a publicarlo.
Así que por eso me tenéis aquí, reseñando otra vez otro libro de Mac: Memorias de un viejo informático. Vamos con él.
El libro es la recopilación de la magnífica serie de artículos que Macluskey publicó en El Cedazo hace ya unos cuantos años, bajo el título Historias de un viejo informático. Mac ha revisado los artículos, los ha mejorado y añadido algunas cosas, y luego ha realizado la compilación – el caso es que, si leíste la serie sabes de lo que habla el libro, y si no ¿a qué estás esperando?
No se trata de una obra de ficción como Begin, sino de unas memorias de verdad, ya que Mac es, en sus propias palabras, un informático de los tiempos del cólera. Para que te hagas una idea, empezó a estudiar la carrera en Madrid en 1972, dos años antes de que yo naciera. Puedes imaginar el tipo de ordenadores que había por entonces y el estado de la informática en España – pero no hace falta que lo imagines, porque en el libro Mac lo describe de una manera única.
IBM 3081 de principios de los 80.
El libro es único en primer lugar porque no se trata de una obra de investigación: es el testimonio directo, de manera absolutamente personal, de la informática española desde 1972 hasta el estallido de la “burbuja punto com”. En el libro hay apuntes escaneados de la carrera, … vamos, una documentación excepcional de algo muy mal documentado hasta ahora. Esta hoja escaneada da una idea de lo que estoy hablando – el primera día de clase de segundo de carrera, en 1973, hablando sobre Univac:
En segundo lugar, al estar escrito por Mac, tiene su estilo inconfundible: incluye su visión personal de las cosas, intercala anécdotas, opiniones, digresiones y adereza todo con un sentido del humor que conoces si has leído cosas suyas antes. Con todo esto consigue que incluso las partes del libro que podrían resultar más aburridas al lego sean cercanas y animadas (y son bien pocas).
Otra manera de poner en perspectiva la etapa histórica que describe el libro es el hecho de que el capítulo 9 (casi a la mitad de camino) es el momento en el que aparecen los primeros PCs, y el capítulo 11 donde irrumpen las bases de datos relacionales. Estamos hablando, sí señor, de la prehistoria – al menos para los pimpollos como tú y yo.
Anuncio de un módem Penril de 1972.
¿De qué otras cosas habla el libro? Sería imposible mencionar todas, pero lo hace del pánico del año 2000 –cuando se suponía que el mundo como lo conocíamos podría desaparecer–, del COBOL, del modo de trabajo en los departamentos de informática en las décadas de los 70 y 80, cuando los vendedores de mainframes, como IBM, te “regalaban” personal que se encargaba de la máquina, gratis total, porque el precio del monstruo era tan enorme que un sueldo era una broma a su lado, de la guerra de los PCs en los 90 –MS/DOS, OS/2, Windows–, de personajes cruciales como Chris Date o Bill Gates, del crecimiento y estallido de la “burbuja punto com”… de todo.
Pantalla de arranque de OS/2 2.1.
Siempre me han fascinado los relatos contados “desde dentro”: da igual que sea un médico, un piloto o un informático. Y en este caso no sólo tenemos casi cuatrocientas páginas de relato personal desde la trastienda, sino que encima está bien escrito, con documentación gráfica de la época y uno aprende cosas que ni siquiera sabía que quería aprender… vamos, una joya. ¿Soy suficientemente objetivo?
Si todo esto fuera poco, encima Macluskey ha puesto el libro a la venta tan barato que no se me ocurre ninguna razón para no comprarlo: la versión electrónica cuesta unos tres euros, y la de papel (¡cuatrocientas páginas!) nueve euros. No hace falta que diga más, ¿no? Pues eso.
Sólo una petición final: si leéis el libro y os gusta, comentadlo y valoradlo en Amazon y Lulu, ya que será una gran ayuda para Mac. En esas plataformas las reseñas y valoraciones son esenciales para vender libros, y creo que éste merece ser conocido por mucha gente.