El Tamiz

Antes simplista que incomprensible

Falacias - Es malo beber leche y zumo de fruta

Hace muuucho tiempo que tenemos abandonada la serie de Falacias, pero es que no ha surgido ninguna lo suficientemente interesante como para hablar de ella. Sin embargo, recientemente recibí un correo de Óscar en el que me preguntaba por una que no había oído antes. Mi sorpresa fue mayúscula cuando, al buscar en la red y preguntar por ahí, me encontré con que parece estar muy extendida, a pesar de que me parece tan fácil de rebatir que se cae prácticamente sola.

De hecho, mucho me temo que casi todos los lectores habituales no creéis en el mito de hoy, pero he pensado que sigue mereciendo la pena escribir sobre él. Por un lado, mucha gente encuentra artículos de esta serie a través de búsquedas en la red, con lo que puede ser útil a otros; por otro lado, a veces nos topamos con personas que defienden cosas como la de hoy y, aunque tenemos clarísimo que se equivocan, no tenemos a mano los argumentos razonados para desmontar la mentira, de modo que espero que esto sirva de apoyo a quienes tengáis que lidiar con estos asuntos algún día con familiares, amigos y compañeros de trabajo.

La Falacia de hoy tiene que ver con los alimentos, y tiene varias formas distintas, aunque todas tienen algo en común. Básicamente, se oye por ahí que no es bueno beber leche y luego zumo de frutas, o alternativamente zumo y luego leche, o leche y luego fruta, o incluso la versión extrema, “después de la leche, nada eches”, que desaconseja incluso beber agua después de leche.

Mentira.

Oops, comentarios = on

Se me olvidó cambiar el estado de los comentarios en la solución de ayer al desafío (la entrada anterior, el desafío, no tenía comentarios a propósito, pero ésta debería haberlos tenido). Ya está solucionado, con lo que podéis comentar a gusto.

¡Gracias a J y Oldman por el aviso, ya me extrañaba a mí que nadie dijera ni pío!

Desafíos - El frontón chiripitipiti (solución)

El desafío del frontón chiripitipiti era un infierno como pocos… no es sorprendente que sólo un puñado de vosotros haya llegado al final. No os preocupéis, porque alternamos dificultad y el siguiente no será tan espantoso. Pero la dificultad de éste ha hecho algo bueno: casi se me saltan las lágrimas de emoción al leer algunas de las respuestas, la inteligencia y el ingenio que habéis demostrado. Y no hablo sólo de las que menciono aquí. Ha sido muy grande… y si no me crees, espera a leer las soluciones finalistas y ganadora. Si no aprendes algo nuevo me como el sombrero; desde luego, yo lo he aprendido.

Eso sí, un aviso: si no te gusta la física heavy metal con ecuaciones a tutiplén, mejor no leas las soluciones. Creo que hay una gran belleza en verlas todas juntas, y me ha parecido maravilloso leerlas –en un momento digo por qué–, pero hace falta que te gusten las matemáticas, más aún que la física, para que no sea un horror leer el ladrillo que te espera. ¡Avisado estás!

Desafíos - El frontón chiripitipiti

Desafíos El Tamiz

Como sabéis los habituales, nuestros desafíos son problemas de física y matemáticas, unos más fáciles y otros menos, con los que intentamos tres cosas: por un lado, que pienses un rato y te olvides de la hipoteca; por otro, que aprendas algo nuevo cuando no consigas llegar a la solución y, además, que disfrutes leyendo las soluciones de otros, incluso cuando lleguen a la misma conclusión que tú, porque siempre te sorprende alguien (al menos, a mí me pasa).

El desafío de hoy pertenece a un grupo que me encanta: se trata de un problema que involucra conceptos fáciles, y se empieza de un modo muy sencillo, pero luego llegas a un punto en el que… pero bueno, no quiero dar pistas. Así que espero que el de hoy os haga rechinar los dientes y sudar un poco. Los datos relevantes para el envío de soluciones (como siempre, a desafios@eltamiz.com):

  • Tenéis hasta el domingo 6 de noviembre inclusive

  • No importa cuándo se envíe la solución; lo importante no es la rapidez, sino la precisión, la creatividad y la claridad en las explicaciones

  • Se puede trabajar en grupo siempre que se mencionen los nombres de todos los miembros del equipo

  • Algo que siempre digo a mis alumnos: es infinitamente mejor dar una solución aproximada, por burda que sea, que no dar ninguna. Si nadie obtiene la solución perfecta, quien más se aproxime será el ganador (si explica bien las cosas, claro)

  • Es posible utilizar programas de ordenador siempre que los hagas tú y los envíes como parte de la solución

Dicho esto, vamos con el desafío en cuestión.

Las ecuaciones de Maxwell - Ley de Faraday

Libro disponible:
La serie está disponible como libro en tapa dura y como libro electrónico.

En esta mini-serie sobre las ecuaciones de Maxwell, tras la introducción histórica, hemos explorado ya juntos las primeras dos ecuaciones: la ley de Gauss para el campo eléctrico y la ley de Gauss para el campo magnético. Si no has leído los artículos anteriores, te recomiendo encarecidamente que lo hagas antes de continuar con éste, porque en gran parte explicaré conceptos nuevos en contraposición a lo que vimos allí.

No voy a repetir de nuevo lo que afirmaban las dos ecuaciones anteriores como principios físicos, pero sí quiero poner de manifiesto lo que tenían en común. A veces las ecuaciones de Maxwell se nos embrollan en la cabeza, y es más fácil recordar lo que significan agrupándolas dependiendo de qué cosas las diferencian o las asemejan. Y, como veremos hoy, es muy fácil dividir las cuatro en dos parejas –las dos que hemos visto hasta ahora y las dos que nos quedan por ver–.

Las dos leyes de Gauss que hemos visto definían características del campo eléctrico y el campo magnético de manera independiente. En ningún caso se mezclaban ambos – los propios nombres así lo reflejan. Si sólo existiesen estos dos principios físicos, el campo eléctrico y el magnético serían conceptos completamente independientes; sin embargo, no lo son en absoluto, como empezaremos a ver hoy. Ahí está la gran diferencia entre las dos ecuaciones que veremos y las dos que hemos visto ya: en las dos que nos quedan se mezclan ambos campos.