(Por si no lo sabes, thpbbbbt es la “pedorreta de El Tamiz” a las estupideces que se oyen por la red y no tienen pies ni cabeza).

Me juré a mí mismo que no haría caso de esta “noticia”, y que no le daría eco, incluso después de que uno de vosotros me preguntara sobre ello, pero al final no he podido resistirlo: se ha extendido como la espuma por la red. Sé que la inmensa mayoría de los lectores habituales probablemente no os creéis estas cosas, pero me indigna que, si buscas en Google sobre este asunto, sólo aparezcan estupideces, de modo que quiero poner mi granito de arena y que los que buscan para saber más puedan encontrar “la otra cara de la moneda”.

La “noticia” en cuestión es la afirmación, por parte de Richard Hoagland, de que existen construcciones de una antigüedad enorme en la superficie de la Luna, descubiertas por los astronautas del Programa Apolo, y de que la NASA está haciendo todo lo posible por ocultarlo. Hoagland cuenta con el testimonio de Ken Johnston, que trabajó gestionando fotografías del Programa Apolo y sostiene que la NASA le ordenó destruir algunas fotos; según Johnston, él no las destruyó y esas fotos, que enseña ahora, supuestamente muestran construcciones en la Luna. Por si no lo habías leído por ningún sitio, aquí tienes un enlace para leer sobre el tema.

¿La opinión de El Tamiz al respecto? ¡thbttpbbpt!

Desde luego, desde esta página no puedo demostrar de manera fehaciente que, en este asunto concreto, Hoagland está mintiendo: ni siquiera ha mostrado aún las fotos, entre otras cosas porque todo esto le sirve para vender un libro en el que, supuestamente, revela todos los secretos. Pero sí quiero avisarte, si te topas con esto por la red o alguien te lo cuenta, del contexto y los antecedentes de este “pájaro”.

Por cierto, Johnston (el que supuestamente guardó las fotos) es nuevo en el “negocio”, pero ya ha mentido sobre varias cosas en el breve tiempo en el que sabemos de él (por ejemplo, sus títulos académicos). De hecho, dimitió de su puesto honorífico como “Embajador del Sistema Solar” cuando se inquirió sobre su titulación. De modo que, aunque no sea de la “talla” de Hoagland, debe de ser también un sujeto interesante.

El patrón de esta “noticia” no es nuevo: Hoagland ha hecho algo muy similar en muchas ocasiones anteriores, asociado a otros individuos como ahora o en solitario. Normalmente, lo que suele hacer para generar expectación (y vender libros) es mostrar una imagen de mala calidad de la Luna, Marte u otros cuerpos del sistema solar, afirmar que se ve claramente algo extraño en esa imagen y, a partir de ahí, construir las más descabelladas teorías.

Un ejemplo muy fácil: ¿te acuerdas de la famosa “cara de Marte”? Hoagland fue el que se inventó que ahí había una cara. Claro, la imagen era de muy mala calidad, y durante muchos años no tuvimos otra. Cuando obtuvimos mejores fotografías de la “cara de Marte”, se vio claramente que era simplemente una colina, pero para entonces Hoagland había ganado muchísimo dinero con su libro sobre el asunto.

Mi favorita, sin embargo, es su teoría sobre Jápeto, la luna de Saturno. Según Hoagland, las imágenes (de mala calidad, por supuesto, o se vería claramente la realidad) mostraban que Jápeto no era un satélite natural, sino una construcción artificial, una suerte de Estrella de la Muerte alrededor de Saturno: no te pierdas las fotos de su página web. Una vez más, cuando Cassini pasó muy cerca de Jápeto sacó fotografías de una calidad sin precedentes y se reveló la mentira de Hoagland, pero después de que, durante años, el pseudocientífico ganara pasta gracias a su invención.

Pero éstas no son las únicas teorías de Hoagland. No te pierdas otras que no tengo tiempo de desarrollar, para hacerte una idea del personaje:

• Marte era originalmente el satélite de otro planeta mayor. En un momento dado, el planeta explotó, dejando a Marte como planeta aislado.

• La avanzada civilización marciana (que había construido la “cara de Marte”) predijo ese cataclismo y se trasladaron a la Tierra para escapar: la raza humana es la heredera de esa civilización.

• Los robots de la NASA enviados a Marte han encontrado fósiles con restos biológicos, y los han destruido.

• Los mismos robots han encontrado numerosas piezas de maquinaria en las zonas de Marte que han explorado, como por ejemplo una cabeza de robot sospechosamente similar a la de C3-PO.

• Existen estructuras artificiales semitransparentes hechas de cristal en la Luna, y fueron descubiertas por las misiones Apolo, pero la NASA ha tapado todos los datos para que no se conozcan.

• Los doce astronautas americanos que han caminado sobre la Luna niegan todas las afirmaciones de Hoagland porque la NASA ha borrado su memoria selectivamente, de modo que no recuerdan nada.

• Los ataques del 11 de Septiembre sobre las Torres Gemelas son el resultado de una conspiración masónica.

• La NASA, la FEMA y el gobierno estadounidense están controlados por los masones.

• Las teorías que dicen que el hombre nunca ha llegado a la Luna fueron iniciadas por la propia NASA, para ocultar las cosas que las misiones Apolo encontraron allí.

• Hoagland ha desarrollado lo que él llama Física Hiperdimensional, que la comunidad científica ignora adrede porque la mayoría de los científicos son parte de la conspiración de la NASA.

Hay más, pero no quiero aburrirte. Después de leer esa lista probablemente ya tienes hasta escalofríos. Simplemente échale un ojo a su página web si quieres reírte un rato.

El problema, y parte de la razón de que me sea imposible demostrar totalmente que lo que dice esta vez es falso, es que las teorías pseudocientíficas no son falsables – ahí está una de sus diferencias con la ciencia real. Da igual los datos que tengamos, si son compatibles con sus teorías, los aceptará. Si no lo son, es que la NASA los ha modificado o inventado. Si cualquier persona está en desacuerdo con él, ha sido comprada por la NASA, es parte de la conspiración o su memoria ha sido borrada. (¿Me pregunto en cuál de los grupos estoy yo?)

De modo que mi consejo en este caso es: cautela. No te creas todo lo que lees y, si tienes que creer a alguien, elige muy bien a quién crees. Para que yo me crea algo de lo que dice un sujeto que se lleva enriqueciendo décadas gracias al dinero de los crédulos que compran sus mentiras, tendría que enseñarme a un marciano para que pudiera hablar con él. Hasta entonces, sólo tengo una cosa que decir: ¡thbppppt!

Y, por si quieres saber más sobre las “credenciales” de Richard Hoagland, puedes leer sobre él en la excelente página Bad Astronomy de Phil Plait. No tiene desperdicio, si dominas la lengua de Shakespeare.

Por otra parte, y también relacionado con la Luna, pero esta vez de verdad: si no has visto los vídeos enviados por la sonda japonesa Kaguya, me han parecido geniales. Puedes verlos aquí. La foto de la Tierra vista por Kaguya también merece realmente la pena (click en la imagen para ver la foto a mayor resolución). Preciosa, ¿verdad?