En la edición de hoy de Ahora que lo pienso… _trataré de contestar a una pregunta que puede parecer una tontería al principio, pero no lo es. De hecho, un número muy grande de búsquedas alcanzan El Tamiz a través de esta pregunta (creo que debido a los otros artículos _acerca del Sol_ y _las supernovas_); pero aquellas entradas no ofrecen una respuesta concreta a la pregunta - _Ahora que lo pienso…¿Por qué no explota el Sol?
Como digo, la pregunta tiene mucho sentido: los seres humanos hemos realizado explosiones termonucleares de fusión en nuestro planeta (somos así de estúpidos), en las que se tienen unos 20 kg de material fusible y la energía se libera en forma de explosión. Recuerda que el término “explosión” en física simplemente significa “liberación muy rápida de energía”. La única diferencia, por ejemplo, entre quemar gasolina y hacer que explote es el ritmo al que se produce la reacción.
Como ejemplo, una central nuclear de fisión produce la reacción “poco a poco”, liberando energía de manera controlada, como esperamos que algún día suceda en las centrales nucleares de fusión. Por el contrario, en una bomba atómica de fisión el uranio realiza la reacción de manera muy rápida, liberando toda la energía en muy poco tiempo: explota.
¿Por qué, entonces, el Sol se comporta más como una “súper-central de fusión” en vez de como una “súper-bomba atómica”? En el Sol no hay nadie que “controle” la reacción, de modo que ¿por qué no se produce de golpe, sin freno? Como digo, es una pregunta que tiene mucho sentido, pero se basa en una concepción falsa - el Sol no se comporta en absoluto como una “súper-central de fusión”.
De hecho, la respuesta a esta pregunta es muy clara, aunque tal vez sorprendente:** El Sol sí “explota”. El Sol está “explotando” mientras lees este artículo.**
** ** _La mayor bomba nuclear de todas es la que nos ilumina. _
Las bombas nucleares de fusión tienen una masa fusible de unos 20 kilos. E_n el Sol se desintegran 700.000.000.000 kilogramos cada segundo. El Sol no es una “central nuclear”, es un pedazo de bomba de fusión miles de millones de veces más potente que ninguna que construiremos jamás. De hecho, es el equivalente de que exploten _un billón de bombas atómicas de 100 megatones cada segundo.
Bien, puedes aducir, pero ¿por qué no ha desaparecido todo ya? ¿Por qué no va aumentando la velocidad de la reacción hasta que se consuman, por ejemplo, mil billones de toneladas por segundo, o un cuatrillón de toneladas por segundo?
Porque el Sol es enorme. La fusión necesita un combustible (hidrógeno) y las condiciones necesarias de presión y temperatura - y según se va desintegrando hidrógeno, lo que queda (helio) no se fusiona. De modo que la reacción de fusión va generando “ceniza” (material no fusionable en la situación actual del Sol) de helio que hace que descienda la velocidad: la fusión tiene que “trasladarse” a zonas en las que haya más hidrógeno, y el tamaño del Sol es tan gigantesco que no da tiempo a que se produzca más rápido - piensa que el diámetro del Sol es de un millón y medio de kilómetros. Podrías poner 109 Tierras una detrás de otra en línea recta, y tendrías un diámetro del Sol.
Pero si piensas en la comparación de tamaños de una bomba de fusión (20 kilos) y el Sol (2·1027 kilos), el ritmo al que se producen las dos explosiones es muy parecido. Como el Sol es tan gigantesco, el tiempo que tarda en explotar es de miles de millones de años - pero es una explosión tan válida como la de la bomba de hidrógeno fabricada por nosotros. La diferencia es que, al ser nuestra estrella tan enorme, su propia gravedad hace que muy poca masa salga “despedida” como en una de las explosiones a la que estamos acostumbrados.
Por cierto, esta “explosión” del Sol no se refiere en absoluto a las supernovas. Si lo que estás buscando es información sobre eso, deberías leer este artículo.